¿Te imaginas que te viene a buscar un helicóptero eléctrico para llevarte de un lado a otro? ¿O que a tu próximo coche tuvieras que cambiarle las alas?
Los avances en movilidad no solo se dan sobre el asfalto: el cielo también tiene mucho que ofrecer. Las innovaciones se suceden en este ámbito y ya nos permiten vislumbrar cómo nos moveremos en el futuro, cuando tal vez tengamos que mirar hacia arriba para encontrar nuestro vehículo.
El nuevo concepto de movilidad 3D se materializa en aeronaves que aspiran a volar por la ciudad e incluso en vehículos híbridos, capaces de volar o rodar, según convenga más en función del tráfico.
Es una antigua aspiración de las empresas de logística: poder realizar entregas de paquetería mediante drones que aparecen en la ventana o en la terraza.
Ya en 2013 Amazon anunció la puesta en marcha de Prime Air, una iniciativa para promover este tipo de reparto aéreo en las ciudades.
Aunque Amazon ya ha puesto en marcha algunos programas piloto, este servicio todavía no ha logrado despegar del todo. Una de las principales razones es la estricta normativa que restringe el uso de aviones sin tripulación en las ciudades.
En otros lugares, compañías como Zipline han logrado utilizar drones para llevar cargas importantes a áreas mal comunicadas de Ruanda o Ghana tan importantes como sangre para transfusiones o medicamentos.
Mientras, las empresas logísticas siguen buscando la manera de utilizar estas aeronaves para facilitar la entrega de mercancías. Amazon ya ha obtenido permiso de la FAA para expandir el uso de sus drones y ha realizado sus primeras pruebas en la Unión Europea. Su intención es lanzar este servicio en Italia durante este mismo año.
Uno de los grandes retos de la movilidad aérea son sus emisiones contaminantes, aunque ese puede convertirse en un problema del pasado en la próxima Expo de Riad, que se celebrará en 2030.
En la capital saudí se han propuesto que miles de pequeños helicópteros eléctricos se dediquen a trasladar visitantes de la Exposición Universal.
Una empresa austriaca, FlyNow Aviation, producirá en Arabia Saudí unas aeronaves que, por el momento, son un prototipo. Concretamente, estos «ecópteros» podrán transportar hasta 200 kg con una autonomía de 50 km y volar a una velocidad máxima de 130 km/h. Tendrán capacidad para un máximo de dos personas
Se trata de cifras muy adecuadas para el uso que se podría llegar a hacer de ellos en la Expo de Riad, dado el tipo de desplazamientos que se realizarán. Eso sí, además de los helicópteros eléctricos, será necesario desarrollar zonas despejadas para la recogida y entrega de pasajeros, así como una infraestructura de recarga adecuada.
Junto a los helicópteros eléctricos que se espera que estén listos para la Expo de Riad, se ensayan otras alternativas similares para que funcionen como aerotaxis en las ciudades. Se trata de los conocidos como eVTOL, vehículos eléctricos voladores con despegue y aterrizaje vertical.
Fabricantes como Stellantis ya se han puesto manos a la obra con estos taxis voladores. Se trata de aeronaves con mayor capacidad de transporte que los pequeños helicópteros eléctricos.
El constructor trabaja ya para llevar el modelo Midnight a la producción en serie. Este eVTOL puede transportar a cuatro pasajeros y un piloto. Es un taxi volador en toda regla.
Aunque los aerotaxis que se ensayan para el futuro no tienen ruedas, también existen los coches voladores. Es decir, vehículos que permiten tanto volar como rodar, en función de las necesidades de su conductor.
Existen distintas opciones en este sentido. Una de ellas sería la del modelo chino Xpeng, que no es exactamente un coche volador, pero sí un vehículo de gran tamaño que lleva dentro un eVTOL para poder volar llegado el caso. Su apariencia es muy similar a la de un Cybertruck de Tesla.
El Xpeng ha completado ya su primera exhibición en público y los pedidos se han disparado: hasta 2.000 unidades se podrían entregar ya en 2026 a sus nuevos dueños, que deberán abonar a cambio más de 240.000 euros por cada una de ellas.
Otra opción es la del coche volador puro, es decir, un vehículo con ruedas que, en un momento dado, podría llegar a despegar y echar a volar. El Model Zero de Alef Aeronautics ya ha conseguido rodar y despegar durante unos segundos en California, superando a otros vehículos.
La autonomía del Model Zero en tierra es de 320 km, mientras que puede volar hasta 177 km, según la compañía. Pesa menos de 400 kg y costará más de 300.000 dólares.
Más allá de su elevado precio, quienes compren este tipo de vehículos deberán tener en cuenta que la normativa que les permite circular libremente por espacios públicos todavía no está desarrollada. De momento, solo es posible utilizarlos en pruebas.
