Hoy en día realizamos una gran cantidad de gestiones por internet, desde formalizar una matrícula a reservar un alojamiento turístico, abrir una cuenta en el banco o comprar y vender a través de aplicaciones de segunda mano, por poner algunos ejemplos.
Para efectuar este tipo de tareas cada vez es más habitual que las empresas o instituciones soliciten enviar una imagen del documento nacional de identidad (DNI) por internet.
Esto les permite verificar que una persona es quien dice ser o incluso remitir a las autoridades determinados datos que a veces les exigen.
Lo cierto es que, una vez que la compartimos, ya no sabemos en manos de quién puede acabar esta imagen, así que resulta fundamental aplicar el sentido común y proteger bien nuestro DNI antes de enviárselo a terceros.
El DNI nos identifica ante las autoridades y en distintas situaciones legales. El problema es que, si cae en manos equivocadas, nos expondremos a serios riesgos como los siguientes:
Esto significa que los delincuentes se harán pasar por ti para lo que quieran, desde realizar alguna estafa en tu nombre hasta registrarse en una casa de apuestas, abrir cuentas, pedir créditos al consumo a través de financieras, hacer compras y ventas, etc.
Con ella serán capaces de realizar trámites online haciéndose pasar por ti y cometer alguna estafa que puede acabar metiéndote en problemas.
Hay servicios por internet que se contratan sin que el vendedor te tenga delante en ningún momento. Por eso, cualquier persona con tu DNI podría darlos de alta, con los inconvenientes personales y económicos que esto supondría.
Una vez que envías tu DNI por internet a un tercero, ya no está en tus manos dónde puede acabar: es posible que lo publique en redes sociales, que lo difunda masivamente o que lo utilice para cometer un delito.
Como hemos visto, enviar el DNI tal cual es arriesgado. Si aun así decides hacerlo, hay algunas precauciones que puedes adoptar para proteger el documento y evitar riesgos. Estas son algunas de las recomendaciones del Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE):
Es conveniente compartir tu DNI a través de plataformas que ofrezcan medidas de seguridad adicionales, por ejemplo, proteger el documento con una clave. Solo el receptor con la clave tendrá acceso al contenido.
Si almacenas tu DNI en una nube, asegúrate de que se hace de manera cifrada. Muchos servicios cloud ya protegen este tipo de información con una capa de seguridad adicional.
Como has visto, compartir documentos privados por internet implica una serie de riesgos que debes conocer para poder minimizarlos y proteger tu información personal de manera correcta.
Recuerda contrastar que quien te lo solicita es quien dice ser, envíalo de manera segura (usando una conexión de confianza, cifrándolo, etc.) y confirma que el destinatario solo hará uso de tu documento para el fin que te explicó. Si no puedes hacerlo así, es mejor que no lo envíes.
