«Tapar agujeros» es una de las respuestas más comunes que suelen dar quienes han ganado un premio de la lotería.
Esta expresión normalmente está relacionada con saldar deudas, en muchos casos vinculadas a la compra de la vivienda, según pone de manifiesto el estudio Algo más que “tapar agujeros”: efectos de los premios sobre algunas decisiones económicas y personales de los españoles, impulsado por Fedea.
Este informe analiza los efectos económicos de los premios de la lotería en España entre 2016 y 2021 y revela que ganar un premio implica un cambio significativo en el comportamiento financiero de los afortunados.
La investigación también muestra que muchos de los ganadores deciden emprender nuevos caminos laborales o procuran reducir las horas trabajadas.
Según el informe, los premios animan a las personas asalariadas a dejar de trabajar, especialmente en el caso de las mujeres sin hijos cerca de la edad de jubilación y con poca renta. Por el contrario, los hombres con hijos cercanos a la edad de jubilación y con rentas elevadas tienden a emprender.
Los premios de mayor cuantía tienden a utilizarse para la cancelación de deudas, la adquisición de bienes inmuebles y la contratación de productos financieros.
La inversión más urgente suele ser la adquisición de la vivienda habitual, una decisión que hace que el dinero del premio se agote en los primeros años. En esta línea está la cancelación de deudas hipotecarias, una decisión que consolida su estabilidad financiera.
Por otra parte, el estudio muestra la preferencia de los agraciados por la inversión en activos financieros, habitualmente en un momento inmediato a la consecución del premio —a excepción de los fondos de inversión—.
El informe de Fedea muestra que los ganadores de la lotería tienden a casarse tras recibir el premio. Sin embargo, la obtención de este dinero extra no es algo que influya en la separación de los matrimonios.
Los premios tampoco parecen afectar a la decisión de tener hijos. «Resulta interesante observar que cuando ya se tiene algún hijo, la obtención del premio desanima a tener más descendencia», apunta el estudio.