Los retos del primer viñedo del mundo

Con 951.693 hectáreas plantadas, España es el primer viñedo del mundo y el primer exportador en términos de volumen con 24 millones de hectolitros, cuatro millones más que Italia y nueve más que Francia.

Sin embargo, el precio medio de exportación española se sitúa en los 1,06 euros por litro, frente a los 5,37 euros de Francia. Esto supone que, pese a exportar un 20% más que Italia y un 50% más que Francia, los ingresos españoles son un 50% inferiores a los italianos y un 67% menores que los franceses.

Un dato difícil que se puede mejorar impulsando el posicionamiento de la industria española y creando redes de comercialización potentes que ayuden a dar un empujón a la marca España, como destacó el presidente de Bankia, José Ignacio Goirigolzarri, en una conferencia en la Feria Nacional del Vino (Fenavin).

El reto de mejorar las exportaciones

El Observatorio español del Mercado del Vino de 2016 muestra un “panorama positivo” para el sector, pero con camino por recorrer tanto en la mejora de las exportaciones como en el posicionamiento de los vinos españoles y sus marcas. También es necesario mejorar las cifras de consumo interno, que se vio afectado durante los años de crisis.

Si bien es cierto que las exportaciones se han duplicado en los últimos 15 años y el número de empresas exportadoras se ha triplicado, hay que tener en cuenta que de las 3.992 empresas exportadoras que existían en 2016, el 54,6% de ellas vendieron en el exterior menos de 25.000 euros.

A esto se añade que las cinco principales empresas exportadoras españolas concentran el 21,7% del total de exportaciones, lo que lleva a hacer una reflexión sobre el tamaño de estas compañías. En España existen unas 4.000 bodegas, la mayoría muy pequeñas, según datos de la Federación Española del vino.

A pesar de todo, el vino español consiguió en 2016 un mejor equilibrio entre la oferta y la demanda, lo que permitió elevar los precios en las ventas exteriores y amortiguar la caída en las exportaciones de años anteriores. También ha mejorado el consumo de vino en alimentación.

Cultura y negocio

Todas las vertientes de los caldos españoles se pusieron de manifiesto en la Feria Nacional del Vino, Fenavin 2017, celebrada en Ciudad Real en el mes de mayo y patrocinada por Bankia.

Fenavin reunió 108.000 visitantes, la mitad de ellos profesionales; más de 3.000 medios de comunicación nacionales; y, lo más importante, 411.000 contactos comerciales. Pero hay dos datos especialmente interesantes y que tienen que ver con la creciente importancia de los mercados internacionales: 720 medios extranjeros asistieron a esta edición y la cifra de compradores venidos de fuera superó el millar, un 25% más que la anterior edición celebrada en 2015.

La vertiente cultural del sector vinícola se dejó notar en las charlas, ponencias y en la entrega de los reconocimientos Embajadores del Vino, además de en una serie de actividades con escritores, periodistas, sociólogos, enólogos, fotógrafos, médicos, cocineros y diseñadores de moda en las que se trataron los vínculos literarios de la bebida, el futuro del vino y sus vínculos con el Camino de Santiago o sus beneficios para la salud.