Países en los que el efectivo está a punto de pasar a la historia
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Bankia
03 Octubre, 2018
El dinero en efectivo siempre ha formado parte de nuestras vidas, pero parece que está destinado a desaparecer. De hecho, hay países que ya piensan en la extinción de billetes y monedas.
Entre ellos se encuentran:
Dinamarca
Eliminar los costes administrativos y financieros que supone el manejo del dinero físico. Ese es el objetivo que persigue Dinamarca, que inició el camino hacia una sociedad sin efectivo en 2016, eliminando el ‘cash’ de tiendas de ropa, restaurantes y gasolineras. El Gobierno danés pretende que en 2030 sus ciudadanos puedan vivir sin guardar monedas y billetes en sus bolsillos, -siendo el primer país que se marca una fecha límite para ello-, pero es consciente de que para que esto se haga realidad es necesario desarrollar una infraestructura de pagos segura.
Suecia
El país que más cerca está de erradicar el dinero físico es Suecia, donde el 95% de las compras al por menor se hace ya sin efectivo y muchas sucursales bancarias no aceptan ni ofrecen billetes y monedas. En este país, la mayoría de las operaciones se hacen mediante pagos electrónicos, incluidas las donaciones a la parroquia. Pero no todo el mundo está de acuerdo con hacer desaparecer el ‘cash’, puesto que ya han surgido voces que alertan de que ser una sociedad sin efectivo puede fomentar la exclusión financiera o hacer que el país se convierta en objetivo de ataques.
Noruega
En Noruega, tan solo el 10% de las operaciones que se realizan cuentan con dinero en efectivo. Cifras como esta han llevado al vicegobernador del Banco Central noruego, Jon Nicolaisen, a afirmar que el papel moneda desaparecerá en una década, y todo debido a los ciudadanos, que son quienes se inclinan por hacer uso de los medios de pago electrónicos.
Corea del Sur
En el segundo trimestre de 2017 Corea del Sur puso en marcha un plan de acción para una sociedad con menos monedas, ya que entiende que su uso tiene un coste elevado. La idea era empezar por las tiendas de conveniencia y, si el proyecto funcionaba, ampliarlo en el tiempo hasta 2020 para analizar sus resultados.
En este caso, aunque los consumidores paguen en efectivo, los comerciantes podrán devolver el cambio de manera electrónica. Así evitan que los usuarios tengan que cargar con ‘cash’ tras la compra. No obstante, la intención del Banco de Corea del Sur no es suprimir las monedas del todo, pues todavía hay muchos jóvenes y ancianos que no se defienden con los pagos electrónicos.
A estas sociedades se unen los ejemplos de Kenia, que en 2007 comenzó a utilizar el sistema de pago móvil conocido como M-Pesa, o Ecuador, que en 2014 apostó por un método similar al detectar que el 40% de la población activa no tenía acceso a una cuenta bancaria, pero el 100% de los hogares disponía de un teléfono móvil.
Ventajas e inconvenientes
Entre las ventajas de las sociedades sin dinero en efectivo, los países que han decidido ir diciéndole adiós señalan la desaparición de la economía sumergida, el ahorro de costes a empresas en la contratación de personal de seguridad e instalación de circuitos de vigilancia, el control del blanqueo de capitales o la disminución del número de robos.
Precisamente, este era uno de los objetivos que se pretendía alcanzar en Suecia, donde Bjorn Ulvaeus, uno de los vocalistas de ABBA, se erigió como defensor de la eliminación del papel moneda después de que su hijo sufriera un asalto en su hogar en el que se llevaron todo el dinero que tenía.
Entre los inconvenientes, todos coinciden en la posibilidad del aumento de fraudes relacionados con los pagos electrónicos y en la exclusión financiera de todos aquellos que no hayan conseguido adaptarse al sistema digital o a las tarjetas.
¿Podría llegar un día en que las monedas y los billetes fueran piezas de colección y solo los pudiéramos contemplar en las vitrinas de un museo? De momento no podemos dar respuesta a esta pregunta. Lo que sí está claro es que el dinero nunca muere, pero los billetes y monedas, sí.
