Hemos conocido sus rutinas, sus logros, sus valores y sus mayores apoyos dentro y fuera del terreno de juego. Sin embargo, todavía falta por descubrir uno de los pilares más fieles de nuestros inconformistas del deporte. Una pareja incondicional que los acompaña más allá de su vida deportiva: sus perros guía. En este reto 16, CaixaBank quiere dar a conocer la labor de estos animales fieles e incondicionales que son los ojos de muchos de los inconformistas del deporte fuera de la pista.
RETO 16. Descubre el tándem perfecto: los otros guías del deporte paralímpico
Tiempo de Lectura: 5 minutos
CaixaBank
29 Mayo, 2020
Seguridad e independencia: claves para las personas ciegas
Las características que debe reunir un perro guía son varias y cambian en función de las características de su dueño y de su tipo de vida, pero todos tienen algo en común: deben ser capaces de adaptarse, tener instinto de guarda y defensa y no ser conflictivos. Y es que, tal y como explica José Manuel Macarro, instructor de perros guía para ciegos desde hace casi tres décadas, “el objetivo de estos animales es dar seguridad e independencia a las personas ciegas”.
Para que este tándem funcione perfectamente, se deben tener en cuenta varias situaciones. Por un lado, el adiestramiento del perro guía, que dura entre 8 meses y 2 años y en el que se le enseña no solo a superar obstáculos o caminar entre los distintos elementos que podemos encontrar en un entorno urbano, sino a pasar desapercibidos para que puedan llevar a cabo su función de ayuda lo más eficientemente posible. Es por eso por lo que cuando un perro guía está desempeñando su trabajo es mejor no acariciarlo o distraerlo, pues podría ponerse en peligro a la persona a la que acompaña.
Estos animales son sumamente obedientes, con una excepción: cuando reciben una orden que podría poner en peligro a su dueño están preparados para desobedecerla. Como si de una “desobediencia programada” se tratase, si el perro guía detecta que la orden supone un riesgo, no la cumplirá.
Compañeros de vida
La Fundación ONCE del perro guía se encarga no solo de proveer de perros guía a las personas con discapacidad visual, sino de emparejarlos con el usuario más adecuado. Lia Beel y Spenzer, Gerard Descarrega y Willow, son un ejemplo de esta combinación ideal. Nuestros dos inconformistas del deporte y sus perros son más que el tándem perfecto, son compañeros de vida que comparten una historia de retos y éxitos.
Descúbrelas en estos artículos del periódico Marca:
Spenzer, los ojos de la atleta paralímpica Lia Beel fuera de la pista.
El tándem perfecto: cómo un perro guía llega a ser los ojos de un ciego.
Y en ese artículo del periódico Sport: