BTS lleva en activo desde 2013 y sus siete miembros han construido una carrera que no solo se ha limitado a la música, sino que han trabajado para crear una imagen amable y cercana, comprometida con causas como el feminismo o el Black lives matter.
Lo cierto, es que estos músicos tienen, desde el 15 de octubre, 17 millones de euros más en sus cuentas, gracias a las 68.385 acciones que posee cada uno de ellos. ¿El motivo? La salida a bolsa de su discográfica, Big Hit Entertainment. Pero no solo le ha salido bien la jugada a los componentes de BTS: el productor y artífice de Big Hit, Bang Si-hyuk, conocido como Hitman Bang, ya acumula una fortuna de 2.300 millones de euros (sumando sus activos, inversiones y patrimonio).
Se trata de la mayor Oferta Pública Inicial (OPI) en los tres últimos años en Corea del Sur: las acciones duplicaron su valor de salida de 100 a 200 euros el primer día de cotización. La capitalización bursátil de Big Hit alcanzó los 6.400 millones de euros al cierre del parqué el 15 de octubre.
Nuevo modelo musical en la era digital
El porqué de este fenómeno está más allá de la música. BTS, también conocidos por nombres como Bangtan Boys, han sabido optimizar su comunicación en redes sociales. La banda no se ha limitado a conciertos presenciales, sino que también ofrece recitales exclusivos online. Esta tendencia, además, se ha intensificado durante la pandemia de COVID-19, ante la imposibilidad de realizar conciertos donde se reúnan grandes cantidades de personas.
Por ejemplo, el 10 y 11 de octubre ofrecieron un concierto en streaming. Vendieron cerca del millón de entradas a precios que rondaban los 40 euros. Sin duda, este modelo de negocio reporta mayores beneficios a la discográfica, ya que solo ha de contar con la infraestructura del streaming, ahorrándose los gastos de una gira, conciertos y festivales, pudiendo llegar a vender muchas más entradas por actuación, ya que no existe aforo como en un recinto físico.
BTS también ha sabido sacar partido a plataformas como Fortnite. Su último single, ‘Dynamite’, se ha lanzado en múltiples remixes para aumentar las ventas y prolongar su presencia en las listas de venta, descarga y streaming. En resumen, Internet está provocando que los músicos exploren cada día nuevas vías, dejando el modelo tradicional atrás.
Por ello, los inversores han visto la rentabilidad en este nuevo modelo, frente a otros muchos sectores que en 2020 están sufriendo las consecuencias de la pandemia.
Los retos que afronta Big Hit en Bolsa
La segunda jornada de cotización de Big Hit, fue harina de otro costal. Las acciones sufrieron una caída del 22%. Uno de los posibles motivos es que su valor cotiza a 40 veces Ebitda, ya que los activos de la compañía son difíciles de valorar, pues hablamos de talento. Además, se trata de una experiencia pionera, sin ninguna referencia anterior para tener en cuenta.
Otra de las incertidumbres es la excesiva dependencia de la discográfica Big Hit del grupo de BTS. El 87% de los beneficios de la compañía proceden de la actividad de esta banda. Si alguno de los miembros decide marcharse, si participan en algún escándalo o sus nuevos lanzamientos se convierten en un fracaso, esta dependencia pasaría factura a Big Hit. Por ejemplo, en China ya se ha organizado un boicot a la banda por unas palabras de uno de sus componentes sobre la Guerra de Corea.
Por otra parte, en Corea del Sur el servicio militar es obligatorio y tiene una duración de entre 18 y 24 meses. Suga y Jin, integrantes de BTS, se acercan a los 28 años, edad límite para realizar el servicio militar, con lo que la discográfica ya ha anunciado que los BTS irán incorporándose a la ‘mili’ de manera escalonada y que se ha adaptado la agenda de lanzamientos y conciertos a esta realidad. Es posible que esta circunstancia también afecte a la cotización de Big Hit.
De internet a la Bolsa: la hora de los influencers
A la irrupción en los parqués de BTS, se suma la posible llegada de la influencer Chiara Ferragni a la Bolsa de Milán. La italiana ha declarado al suplemento económico del ‘Corriere della Sera’ su intención de “cotizar en bolsa” o fusionar su marca personal con un gran grupo de lujo. Su imperio se articula en tres ejes: Sisterhood, su agencia de Marketing, que facturó 11 millones de euros en 2019; TBS Crew, que gestiona el blog ‘The Blonde Salad’, con una facturación de 20 millones de euros en 2019; y Serendipity, la empresa que comercializa sus productos de moda, informa El Confidencial. Reuters atribuye a Ferragni un grupo empresarial de unos 80 millones de euros.