En la era digital, los ciberdelincuentes innovan constantemente en la manera de estafar, bien sea a través de nuevos timos, bien con el uso de distintas plataformas.
Una de las más habituales en el último año ha sido WhatsApp, en la que han surgido distintas estafas para obtener datos y dinero de las víctimas.
En este artículo, recogemos algunas de las frecuentes y te contamos cómo no caer en la trampa.
Una persona, generalmente con un perfil falso asociado a una empresa prestigiosa, se pone en contacto contigo a través de WhatsApp con una oferta de empleo fácil de implementar y con retribución instantánea.
Para recibir el dinero, te pedirán que entres en enlaces de YouTube y dejes un «me gusta». A cambio, recibirás 5 euros mediante Bizum. Momentos después, te pedirán acceder a un grupo de Telegram donde te irán asignando tareas similares a las que ya has realizado y te incitarán a invertir.
Cuando confías en estas inversiones, los estafadores te pedirán hacer otros desembolsos por importes más elevados para obtener mayores beneficios. Una vez que decides parar de invertir porque no ves el retorno, los estafadores te advierten de que perderás todo el dinero que supuestamente se ha generado.
Recibes un mensaje a través de WhatsApp, presuntamente por error, en el que te confunden con un guía turístico.
Después de disculparse por este malentendido, el estafador, que suele lucir una imagen de perfil de una persona atractiva, comenta que tiene pensado visitar nuestra ciudad y que le gustaría que le hiciéramos de guía. Intenta entablar una amistad para más adelante pedir dinero con cualquier excusa (cancelación de vuelo) o pide hacer clic en un enlace de descarga de malware.
Un estafador contacta contigo por WhatsApp explicando que es una persona conocida por ti que está en el extranjero. Por inercia, solemos tender a identificarlo con alguien conocido.
En ese momento, el estafador se hace pasar por esa persona que le hemos mencionado, indicando que está viajando a tu país con unas maletas llenas de objetos de valor que compartirá contigo, pero, por un problema burocrático, sus maletas han sido retenidas en el aeropuerto.
En ese momento, te pedirá que seas tú el encargado de recuperar el equipaje, para lo que te solicitará desde una foto de tu DNI hasta datos bancarios o, incluso, que hagas un pago para poder ayudarlo.
En otras modalidades, el supuesto amigo o familiar solicita dinero para superar una situación económica adversa o la cancelación del viaje.
En esta estafa, un número desconocido contacta contigo explicando que es tu hijo o hija, al que le han robado el móvil o se le ha averiado y escribe desde otro número temporalmente. Para adquirir un nuevo terminal, te pide dinero con carácter urgente.
Puede que te pida que lo ingreses en algún número de cuenta, hagas un Bizum o compres una tarjeta regalo de alguna marca (Amazon) para luego solicitarte los códigos y canjearlos:
Recientemente, la Policía Nacional ha detenido a 59 integrantes de una organización criminal que realizaba este tipo de estafa. Con el timo del hijo en apuros habrían obtenido 460.000 euros.
Según explican en una nota de prensa, «la red criminal indagaba en redes sociales para localizar a jóvenes a los que investigaban para averiguar sobre su vida y hacer el engaño más creíble y, posteriormente, contactar con sus padres y cometer el fraude».
Otra modalidad de whatsapping consiste en contactar con un usuario de WhatsApp desde un perfil falso de un banco. Suelen utilizar una imagen de perfil con el logo de la entidad, alertando de alguna incidencia en las cuentas del usuario.
Hay también casos de fraude de falsos préstamos en los que se inicia el contacto a través de redes sociales (por ejemplo, Facebook) y luego se continúa el contacto a través de WhatsApp. En esta plataforma ya se solicita información personal de la víctima (DNI, números de cuenta, etc.) y se les pide realizar diversos pagos vinculados a la concesión del préstamo.
En otras ocasiones, piden transferir el saldo a otra cuenta que califican de «segura».
Por estos motivos es importante recordar que tu banco nunca te pedirá este tipo de información por WhatsApp.
El aumento del ecommerce ha provocado que muchos de nosotros estemos con frecuencia esperando un envío. Los delincuentes han aprovechado este hecho para hacerse pasar por una empresa de paquetería y contactar con sus víctimas por WhatsApp, notificando que el envío se ha quedado retenido en Aduanas y es necesario hacer un desembolso para liberarlo.
Otras veces, piden datos personales o invitan a clicar en un enlace malicioso. El INCIBE aporta varios ejemplos que pueden ayudarnos a identificar estos timos.
También conocido como la estafa de los seis dígitos, se trata de un delito de suplantación de identidad para hacerse con el control de nuestra cuenta de WhatsApp con la finalidad de revisar datos personales que puedan valer a los delincuentes para chantajearnos o robarnos.
El modus operandi es el siguiente: recibimos un mensaje de WhatsApp de un número desconocido que se hace pasar por un amigo al que supuestamente le han hackeado su cuenta.
Nos pide ayuda para recuperarla y, para ello, debemos remitirle un código de 6 dígitos que habremos recibido por SMS. Ese código no corresponde a la cuenta de nuestro supuesto amigo, sino a la nuestra, y otorga el control de nuestro perfil de WhatsApp al timador. La Guardia Civil advierte sobre esta estafa:
En este timo, los estafadores se hacen pasar por el jefe de la víctima. Contactan con ella haciéndole entender que tienen su móvil habitual estropeado o que se lo han robado y que precisa con urgencia tarjetas regalo (generalmente de Amazon), por lo que le instan a ir a adquirirlas, con la promesa de que se le devolverá el dinero en breve.
Cuando la víctima las tiene en su poder, le piden que comparta los códigos.
Te damos algunos consejos para evitar caer en estafas de whatsapping:
- Conoce los canales de contacto de tu entidad financiera. En caso de que se comuniquen contigo para informar de alguna incidencia, trata de confirmar esta situación por ti mismo. Si crees que se trata de una comunicación sospechosa por el contenido o por la forma (mensajes con faltas de ortografía, sin coherencia o consistencia, que requieren datos por tu parte o invitan a hacer clic en enlaces no confiables), bloquea el número de WhatsApp y contacta directamente con la entidad, dando cuenta de lo ocurrido, según recomienda el Portal del Cliente Bancario.
- Contrasta siempre la información cuando te soliciten dinero, ya sea por transferencia o Bizum. Si es algún conocido o familiar, contacta con él a través de su teléfono habitual. Si es el caso de una empresa, comprueba la identidad y la pertinencia de la solicitud.
- No cliques en enlaces que te envíen desconocidos o que te parezcan sospechosos.
- No compartas a través de ningún canal tus códigos o claves personales, incluso los que recibas por SMS. Intenta establecer en tus plataformas la verificación en dos pasos: cada vez que te conectes desde un dispositivo nuevo, te solicitará tu contraseña además de un código alfanumérico para comprobar tu identidad.
- Actualiza tu aplicación de WhatsApp para reforzar su seguridad.
- No te precipites a pesar de la urgencia que impriman los mensajes. Los timadores aprovechan las prisas para evitar que reflexiones y realices las comprobaciones necesarias.
- Aunque puedan parecer burdos, los fraudes están perfeccionados por los timadores, que pueden estudiar a las víctimas a través de las redes sociales para ganarse su confianza y alcanzar sus fines. Cualquiera puede llegar a ser víctima del whatsapping, por lo que actuar con cautela y estar prevenido es muy importante.
Si crees que has caído en una estafa por WhatsApp, te apuntamos algunas recomendaciones:
- No pierdas los nervios. Precipitarte puede llevarte a tomar decisiones equivocadas y empeorar la situación.
- Avisa a tu banco. Si se han facilitado datos bancarios o se han hecho operaciones fraudulentas, lo primero es contactar con la entidad bancaria para que se inicien los trámites pertinentes.
- Reporta a las autoridades. Pon en conocimiento de las autoridades la estafa e interpón la denuncia correspondiente ante las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado en cualquier comisaría o a través de sus diferentes portales web. Guarda toda la documentación disponible (pantallazos, conversaciones, SMS…).
- Reporta a las empresas correspondientes. Si el estafador se ha hecho pasar por una compañía, comunícaselo.
- Informa a tus contactos. Si te han arrebatado tu cuenta de WhatsApp, avísalos para que estén prevenidos y no caigan en la estafa a través de su perfil.
- Recupera tu cuenta. Para recuperar tu cuenta, vuelve a entrar en WhatsApp y activa el envío del SMS con el nuevo código de 6 dígitos. Es posible que te pida esperar un tiempo. Una vez que lo obtengas, introdúcelo. Recuperada tu cuenta, comprueba tus conversaciones para ver si el timador ha intercambiado conversaciones en tu nombre. En caso de que este procedimiento no funcione, dirige un email a WhatsApp a través de la dirección support@whatsapp.com e incluye el siguiente asunto «Desactivación de mi cuenta +34 y el número de teléfono» (el asunto es solo pertinente en España).
- Vigila tu móvil con posterioridad. Instala un antivirus que identifique malwares o links Desde el INCIBE aconsejan efectuar búsquedas en Internet para comprobar si hay presencia de tus datos personales en los siguientes meses, una práctica denominada egosurfing. Si lo necesitas, puedes solicitar que eliminen tus datos personales con el derecho al olvido.