Enero se presenta como el momento perfecto para replantearnos algunos objetivos de nuestra economía doméstica y uno de los propósitos de año nuevo más comunes es conseguir ahorrar.
Puede ser complicado, pero si repasamos nuestros gastos habituales seguro que podremos identificar áreas de mejora.
En España, la falta de eficiencia, descuidos o mala organización desembocan en un despilfarro de 5.000 euros al año por hogar, señala Business Insider basándose en el informe de la plataforma Raisin.
Esta cifra casi dobla el ahorro medio anual por hogar, unos 3.420 euros de media, que recoge Funds Society. Pero ¿de dónde podríamos llegar?
Veamos en qué partidas de gastos despilfarramos más para hacer propósito de enmienda y acabar 2025 con unos ahorros inesperados.
La comida es uno de los principales focos de despilfarro en los hogares españoles. Se calcula que por hogar se incurre en un malgasto de 625 euros al año, según la plataforma Raisin.
En total, en nuestro país se despilfarran 12.069 millones de euros en comida al año, mientras que en Europa acaban en la basura 140.000 millones de euros anuales. La Unión Europea entra al detalle con este despilfarro: el 70 % se produce en casa, por lo que tenemos una oportunidad a la hora de evitar que se malgaste en comidas:
- Sé previsor. Planifica tus comidas y compra solo aquello que necesitas para tus menús.
- Sé organizado. Almacena y conserva adecuadamente tus alimentos. No solo durarán más, sino que te organizarás mejor para dar salida a aquello que caduca antes y evitarás que se eche a perder antes de que lo uses.
- Sé responsable. Diferencia fecha de caducidad y fecha de consumo preferente. Busca un uso inmediato para todo aquello que sea perecedero y dale un nuevo uso a aquello que te ha sobrado (si no eres creativo, echa mano de recetarios o incluso de Internet).
En el apartado de alimentación, hay otro pequeño gasto evitable: el agua embotellada. Por hogar, implica un gasto medio anual de 35 euros. Adelantándote un poco a las situaciones, puedes llevar una botella rellenable para saciar tu sed en cualquier momento, con lo que evitarás la compra de agua embotellada.
La factura de la luz es otra partida donde podemos reducir un gasto innecesario. Mantener tus aparatos eléctricos conectados a la red eléctrica, aunque estén apagados, supone un consumo de electricidad constante llamado consumo fantasma.
Su reflejo en la factura de la luz tiene una cifra: 111 euros al año por hogar, explica Business Insider.
La solución es sencilla: desenchufa los aparatos cuando no los estés usando. Para facilitar esta acción puedes utilizar regletas con interruptor: con un solo clic podrás aumentar tus ahorros.
Aunque no lo parezca, el tabaco y el alcohol son gastos que lastran nuestro presupuesto doméstico de manera significativa. El gasto anual por hogar, según el mismo medio, asciende a 1.565 euros.
En este caso, reducir su consumo o incluso eliminarlo se trata de una decisión personal, pero es un propósito de año nuevo que, de cumplirlo, seguro que nuestra salud y nuestro bolsillo agradecerán.
El modelo de la suscripción ha calado en la última década. Desde el streaming hasta el gimnasio, cada vez más servicios y productos piden un año entero por adelantado.
Debemos analizar todas nuestras suscripciones, valorar si podemos sustituirlas por otras más económicas o incluso prescindir de ellas si no les damos demasiado uso.
Business Insider estima que un hogar gasta en suscripciones una media de 1.140 euros al año. Reducir esa cifra es un reto, siempre teniendo en cuenta nuestras prioridades.
El gimnasio es otro de esos gastos que podemos revisar, ya que supone, de media, 45 euros al año por hogar. ¿Cómo mantenerse en forma y ahorrar? Desde habilitar en casa un pequeño espacio para practicar calistenia o pilates hasta buscar un enclave adecuado para la práctica de deporte al aire libre, hay soluciones económicas para mantener un modo de vida saludable.
Los hogares españoles dedican una media de 172 euros al año en lotería de Navidad. Décimos, participaciones…, no podemos resistirnos a la tentación del «¿y si toca?».
Actuar con sensatez y realizar un gasto consciente y acorde a nuestras finanzas en lo que al juego se refiere es fundamental para tener control sobre este gasto.
Hay montones de formas de ahorrar y evitar el despilfarro. No obstante, han de ser compatibles con mantener nuestra calidad de vida y, por qué no, darnos un capricho de vez en cuando.
