El técnico serbio afronta su segunda etapa al frente del FC Barcelona con el deseo de volver a acumular títulos como el último “copero” de 2018
En el baloncesto existen multitud de factores, agentes externos e internos que redefinen un equipo y sus éxitos o hazañas. Muchos analíticos piensan tan solo en los jugadores que conforman una plantilla en un intento por vaticinar un futuro incierto. Una gran plantilla puede obtener numerosos títulos, qué duda cabe, mientras que otra de igual talento se puede quedar a cero.
La grandeza del baloncesto es que hay conjuntos, modestos sobre el papel, que han conseguido deslumbrar al público gracias a un trabajo coherente y un juego efectivo y eficaz. El Barça Lassa es un ejemplo de ello, un equipo llamado a grandes proezas pero no siempre igual de contundente. Svetislav Pešić es el gran responsable de la línea ascendente que mantiene este Barça, actual líder de la ACB, con 16 victorias y solo tres derrotas, así como el vigente campeón de Copa. Repasemos los méritos de este entrenador nacido en la localidad de Pirot, en la antigua Yugoslavia, hace ahora 69 años.
PEŠIĆ LOGRÓ LA ÚLTIMA COPA DEL REY DISPUTADA EN GRAN CANARIA TRAS REGRESAR AL BARÇA EL PASADO AÑO
Compaginó la selección yugoslava con la alemana y actualmente mantiene la nacionalidad croata. Es uno de los mejores entrenadores del mundo por sus innovaciones tácticas y también por el gran palmarés que acumula. Un éxito que ni él mismo llegaba a imaginar cuando ya brillaba con la selección de Yugoslavia, con la que llegó a ganar la Copa del Mundo de Baloncesto y dos Eurobasket —uno de ellos con Alemania. Ahora encara una nueva aventura al frente del Barça, al que llegó el pasado año. En su anterior andadura, en el periodo 2002-2004, consiguió levantar la Euroliga con los blaugrana. También se hizo con la Copa Korać junto al Alba Berlín en 1995 y la Eurocopa de la FIBA con el desaparecido Akasvayu Girona en 2007.