ECONOMÍA

Artesanía 2.0: innovación y sostenibilidad en oficios de toda la vida

Tiempo de Lectura: 3 minutos

Artesanía 2.0: innovación y sostenibilidad en oficios de toda la vida
Avatar
CaixaBank


En un mundo globalizado, donde la industrialización y la producción en masa habían impulsado manufacturas baratas y rápidas, los oficios tradicionales, como la carpintería, la cerámica, la herrería y la alfarería, corrían el riesgo de quedar relegados a un segundo plano.

Sin embargo, el foco en la sostenibilidad, el afán por la recuperación del patrimonio y el fomento de las economías locales están dando un giro a la situación.

Solo hay que echar un vistazo al último catálogo de ocupaciones de difícil cobertura del SEPE: prácticamente en todas las provincias españolas hay demanda de carpinteros.

La construcción ha mantenido la demanda de un perfil fundamental, pero las propiedades de la madera como material (aislante, biodegradable y sostenible gracias a la reforestación y sellos que garantizan la viabilidad de las explotaciones) han conseguido que vuelva a estar en las preferencias de los estudios de arquitectura.

Siguiendo este ejemplo, vemos cómo la sostenibilidad también tiene su peso a la hora de poner en valor alternativas responsables como la artesanía.

Materiales naturales, procesos menos contaminantes y piezas duraderas y biodegradables han vuelto a ser atractivos en un mundo saturado de productos de usar y tirar.

Para enlazar con esta demanda, profesiones artesanales como ceramistas, herreros y carpinteros están adaptando técnicas, diseños y materiales para reducir su huella ecológica, apostando por recursos sostenibles y métodos de producción respetuosos con el entorno.

Innovación en la artesanía para impulsar el oficio

Aunque resulte paradójico, los oficios tradicionales perviven gracias a la innovación. Los artesanos han sabido integrar la tecnología en su trabajo: desde el diseño asistido por ordenador hasta el uso de maquinaria moderna que optimiza procesos sin comprometer la esencia artesanal, la fusión entre tradición e innovación ha sido clave para su supervivencia.

La digitalización también ha facilitado la comercialización de sus productos, permitiendo a estos artesanos alcanzar públicos internacionales sin depender exclusivamente de mercados locales.

Y, de nuevo, la innovación permite avanzar en la sostenibilidad con la vista puesta en la economía circular. Los ceramistas reutilizan restos de materiales especialmente diseñados para recuperarlos antes de cocerlos, aprovechan el calor de los hornos optimizando el uso de la energía y minimizan el volumen de agua necesario para su actividad. Por ello, el impacto de la elaboración de sus piezas llega a compensarse gracias a su durabilidad.

Otro ejemplo es el de los herreros artesanales, que reciclan materiales y aprovechan el calor, llegando a ahorrar un 75 % de energía con técnicas avanzadas tratamiento técnico.

La artesanía como impulso de economías locales

Más allá de la sostenibilidad, la recuperación de los oficios tradicionales también representa la oportunidad de revitalizar economías locales.

Apostar por productos artesanales genera empleo, impulsa pequeñas comunidades y fortalece el vínculo entre productores y consumidores.

Además, iniciativas como talleres formativos y colaboraciones con diseñadores contemporáneos han permitido acercar estos conocimientos a nuevas generaciones, lo que evita que se pierdan con el paso del tiempo.

Enlazando con esta idea, el Cabildo de Tenerife ha lanzado un Plan Formativo en Artesanía 2025 en colaboración con el Museo de Artesanía Iberoamericana de Tenerife (MAIT) y varios ayuntamientos locales.

El programa ofrece cursos de iniciación, perfeccionamiento y especialización en oficios tradicionales como alfarería, cuchillería, confección de indumentaria tradicional y bordado.

Además de preservar el patrimonio cultural, la iniciativa busca garantizar el relevo generacional y fomentar la sostenibilidad económica de estas profesiones tradicionales.

Datos económicos de la artesanía en España

El impacto económico de lo artesano es innegable. En 2022, el sector superó los 6.600 millones de euros, reflejando un crecimiento del 8,7 % respecto al último año previo a la pandemia, recoge el informe Radiografía de la alta artesanía en España, del Círculo Fortuny y la consultora KPMG, en su edición más reciente.

Esta actividad representó el 0,49 % del valor agregado bruto a nivel nacional y contribuyó con un 4,6 % dentro de la industria manufacturera, indica el mismo documento. Además, el informe sostiene que la artesanía en España creó 208.600 empleos en el mismo periodo, lo que consolida su papel en la economía y el desarrollo local.

Estos datos ponen de manifiesto que oficios tradicionales pueden ser una respuesta medioambientalmente responsable, culturalmente consciente y económicamente viable a las necesidades del presente.

Al combinar innovación con patrimonio, sostenibilidad con creatividad y lo local con lo global, estos oficios han demostrado que la artesanía sigue teniendo un papel clave.

Acepto las condiciones de uso.