La geografía urbana, entendida como la forma que tienen los asentamientos urbanos, tiene un papel fundamental en la sostenibilidad de las ciudades. Al igual que hay vehículos de más o menos impacto ambiental, hay entornos urbanos ‘eco’ o de bajo impacto. En este contexto se encuadran las supermanzanas, una solución para devolver el espacio a los peatones.
Las supermanzanas son una forma de hacer las ciudades más sostenibles. Lo hacen prácticamente bajo cualquier métrica ambiental, socioeconómica o de bienestar de la población a la que sometamos. En España, ciudades como Vitoria-Gasteiz o Barcelona ya están implantando este tipo de diseños, con mejoras notables para sus ciudadanos.